Antes de comenzar, resuelvo tus dudas.

Cada viaje de sanación es único, y es normal que surjan preguntas antes de dar el primer paso.

Aquí encontrarás respuestas a las dudas más comunes, para que te embarques en este proceso con claridad y confianza.

Si tu pregunta no aparece aquí, escríbeme.

  • Todas las personas, de todas las edades.

  • Sólo si se trata de un menor de edad y eres su madre o padre. Los adultos necesitan tomar la decisión de iniciar el proceso. Si es para una persona que no puede tomar esta decisión porque está en coma por ejemplo, entonces su familiar más cercano puede hacerlo por ella.

  • No es aconsejable combinarla con registros akáshicos, constelaciones familiares, activaciones de energía, kundalini, entre otras porque puede saturar el cuerpo energético y agravar los síntomas. Si es tu caso, coméntalo en la primera sesión.

  • No puedo darte un número exacto porque cada persona vive un proceso diferente. Pero sí puedo decirte que los tratamientos no suelen largos comparados con otras terapias.

  • No. Siempre estarás consciente de tu cuerpo, emociones, sensaciones y pensamiento.

  • No. Los terapeutas capacitados por la escuela no deben combinar terapias energéticas con la LNT® o crear sus propios métodos incluyendo esta terapia. La combinación puede saturar el cuerpo energético del paciente y agravar los síntomas. Para la LNT® menos es más.

  • Se ha confirmado que durante los últimos 30 años de su práctica, el 80 por ciento de los pacientes obtienen resultados definitivos.

  • Sí. La LNT® se puede aplicar a todos los seres vivos. Personas, plantas y animales.

  • Que percibas más claridad mental, la intuición se fortalece, movimientos en las relaciones personales y profesionales. Mayor consciencia y presencia. Que te sientas alineado con tu ser y su camino auténtico.

  • No. La activación Kundalini no es un proceso terapéutico. Se puede definir como una inyección de la propia energía que se activa desde la zona pélvica de la persona.

  • El autismo no es considerado una enfermedad por lo tanto, no se puede curar. Lo que sí es posible desde la terapia, es ayudar a la persona a disminuir los síntomas que dificultan su día a día. Gestión emocional, dificultad para relacionarse, inseguridad etc.